Las dos caras económicas en la sociedad española

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Los criptoactivos han sido durante el pasado año 2021 uno de los valores que más titulares y seguimiento han tenido.


Sin embargo, en un contexto económico en el que la bolsa, los fondos de inversión y la materia prima han estado fluctuando durante meses sin permitir a los inversores poder confiar del todo en sus valores, las criptomonedas no paraban de crecer y marcar cifras récord mes a mes.


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¿Son las criptomonedas un refugio en los momentos inciertos?


“En realidad ha tenido que venir la guerra para ver que el tema de las conexiones y las criptodivisas son complicadas en entornos de conflicto, bajando su valoración a cifras que no pensaban verse. Todo lo contrario. Todo indicaba a que 2022 sería sin duda el año de ellas, de crecimiento y de acercar esta inversión a mucha más gente que hasta ahora” explican algunos expertos en la materia.


¿Puede ser este síntoma ya una realidad cuando los tipos de interés empiezan a alejarse del 0%?


Según explican desde las principales gestoras, es probable. De hecho, basta echar un vistazo a las tendencias del BCE y del Banco Federal de Estados Unidos para comprender que el tiempo de intereses negativos o cero ya ha pasado y que hay que volver a incentivar la economía con medidas radicalmente diferentes a las que se estaban llevando a cabo.


Mientras los tipos de interés estaban en cero y no rentaban en los productos que tradicionalmente se ofertaban en la banca, fueron muchos los que buscaron rentabilidades que, en el caso de bitcoin y algunas de las otras principales criptomonedas como Ethereum no paraban de promocionarse. De hecho, durante todo el periodo anual estuvieron marcando subidas históricas que parecían imparables.


De hecho, quien comprara cualquiera de ellas a principios de 2020 consiguió sacar rentabilidades históricas. Sin embargo, con el cambio de tendencia desde los bancos centrales y la subida de tipos, puede que vuelvan las rentabilidades en productos más tradicionales y vuelvan a ellos inversores.


Además, la reputación y conciencia que están empezando a extenderse con respecto a la sostenibilidad de minar las criptomonedas está empezando a calar en un tipo de inversor que busca también una serie de productos que respeten y apuesten por el medioambiente.


Pero esta inversión, en realidad, no está destinada a todo tipo de carteras. Son muchos los que durante este 2022 están sufriendo una pérdida de poder adquisitivo que no les permite buscar productos de inversión, sino que, por el contrario, les lleva a buscar líneas crediticias.


La inflación ha hecho que muchos hogares tengan que buscar fórmulas para poder afrontar todos los pagos y obligaciones que les han ido llegando en los pasados meses desde la pandemia.


Y eso, en algunos casos, ha supuesto un problema añadido al no disponer de ahorros después de la pandemia y con el esfuerzo laboral realizado.


Es por eso por lo que son muchos los que buscan opciones de financiación como un préstamo rápido como una forma de recuperar su economía y estabilizar los pagos de algunos bienes o servicios que resultan urgentes. Por otro lado, están las personas que buscan realizar inversiones con ganancias de corto plazo.


En definitiva estas son las dos visiones de la realidad social y económica que enfrenta ahora mismo España.

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