Según análisis de Pandora FMS, sólo el 20% de las empresas españolas ofrecen formación obligatoria en ciberseguridad.

Según análisis de Pandora FMS, sólo el 20% de las empresas españolas ofrecen formación obligatoria en ciberseguridad, un 1% menos que en 2019.

Este porcentaje sitúa a España por detrás de la media de 27, o el 21,20%.

Según los datos analizados por Pandora FMS, correspondientes al INE y Eurostat, Italia (22,50%) y Alemania (23,50%) están por delante de las empresas españolas.

No lo hicieron Portugal, que cayó un 6%, hasta el 19,20%, ni Grecia, donde la tasa no llegó ni siquiera al 10%.

Dinamarca es un buen ejemplo con un 38%, Estonia también es mucho más alta con un 48%.

En términos de datos nacionales de España, liderada por la Comunidad de Madrid (29%) y Cataluña (24%), las estadísticas están mejorando a pesar de una caída general, que en algunos casos asciende al 5%.

“Hay varias razones para este escenario.

En primer lugar, las empresas no invierten en el aspecto digital a pesar de que la digitalización está aumentando. Otra razón es la falta de competencia digital de los empleados. Y por último, y lo más importante, no confiar en las soluciones existentes”, afirma Sancho Lerena, CEO de Pandora FMS, cuya tecnología forma parte de los sistemas de Telefónica, Rakuten y muchas administraciones públicas en España.

La falta de formación obligatoria en ciberseguridad supone un revés para la empresa española, que ha tenido que destinar más recursos a esta área en lugar de otras ligadas a una mayor productividad.

Además, los expertos destacan que España necesita varios cientos de miles de expertos más en ciberseguridad para alcanzar la cifra marcada por Europa.

“Se necesitan expertos en ciberseguridad y empleados con conocimientos suficientes para gestionar los sistemas de seguridad”, enfatizó Lerena.

Según él, la monitorización es una de las soluciones más populares. Estos sistemas analizan en tiempo real todos los datos generados dentro de la estructura informática de una empresa o agencia reguladora. De esta forma, al indicar cuál es el funcionamiento normal y correcto, se asegura una imagen continua del funcionamiento de todos los sistemas.

Por tanto, según admiten, podemos esperar que un posible ataque en España se extienda a hospitales, ayuntamientos, empresas e incluso universidades.