Solo el 20% de las empresas españolas proporciona formación obligatoria en ciberseguridad, revela un análisis de Pandora FMS. A pesar de mejoras en regiones como Madrid (29%) y Cataluña (24%), la falta de inversión, competencia digital y confianza en soluciones existentes son obstáculos, lo que plantea desafíos para la seguridad digital y la necesidad de más expertos en ciberseguridad en España.
Como cada comienzo de año, 2024 viene cargado de nuevos propósitos, por eso, casi la mitad de los españoles se ha propuesto introducir cambios significativos en sus hábitos digitales a partir de Año Nuevo, según una investigación de Kaspersky.
La alianza establece tres áreas clave de colaboración, que incluyen el fomento de talento tecnológico, el desarrollo conjunto de retos en ciberseguridad y la participación de la entidad bancaria en la Comunidad de IMMUNE
Con el avance continuo de la tecnología se generan nuevas oportunidades para los ciberdelincuentes, que aprovechan cada brecha emergente para desarrollar tácticas más complejas y realizar ataques altamente focalizados.
La conocida como "seguridad en el entorno tecnológico" ha experimentado transformaciones significativas en los últimos dos años, particularmente con la adopción generalizada del teletrabajo por parte de las empresas.
Los ataques exitosos, han aumentado, afectando a empresas, organizaciones y personas. El sector financiero vuelve a ser uno de los principales blancos, y el sector industrial experimenta un aumento en los ataques.
Los padres suelen estar muy preocupados por cuestiones como los contenidos inapropiados a los que pueden acceder sus hijos: el ciberbullying, el sexting o los peligros de la adicción a la tecnología.
En la era digital en la que estamos inmersos, y más después de la pandemia, la ciberseguridad cobra cada vez más importancia. Y no sólo a nivel corporativo o empresarial
Los ciberdelincuentes aprovechan la popularidad y expectación que se ha generado en torno al estreno de la película Wonka para distribuir estafas de phishing online.
Sólo en 2022 las cifras de delitos informáticos en zonas como el País Vasco, incrementó los registros en un 80%. Algo que, sin duda, es preocupante y que requiere de una serie de medidas añadidas al cuidado que se tiene de manera habitual al navegar por la red y compartir datos.
